La fiesta se ha acabado

Por si no fuera suficiente con los problemas económicos, ahora también resulta que británicos e irlandeses van a tener que pasar las penurias de la crisis sin ninguna válvula de escape. Y es que, la fiesta en las islas británicas, se está convirtiendo en un artículo de lujo.

Veámoslo con un ejemplo. Pongamos que es tu cumpleaños y quieres celebrarlo con tus amigos. Lo primero que necesitas hacer es avisarles. Pero llamarles es muy caro y costoso (en tiempo), así que mejor haces un mensaje de texto y se lo mandas a todos. Pues bien, si la propuesta de los Verdes sigue adelante en Irlanda, dentro de poco costará un céntimo extra en impuestos por mensaje. No es mucho, pero es que solo acabamos de empezar.

Con todo el mundo yendo hacia la fiesta es tiempo de hacer acopio de alcohol y tabaco. El segundo ya es el más altamente tasado a nivel europeo en Irlanda. Un paquete puede costar más de 7 euros cuando en muchos otros países el precio se sitúa por debajo de la mitad de ese umbral. Pero si la propuesta que estudia el gobierno de Cowen sale adelante, significaría disparar el precio hasta en un 25% más hasta los 10 euros. Afortunadamente, no soy fumador. Y afortunadamente para los fumadores, no se puede fumar en los bares, así que la tentación anida lejos, en las frías calles.

Ante ese panorama, es la hora de emborracharse. Pero algo raro ocurre con los precios. De aprobarse la propuesta de Sir Liam Donaldson de subir el alcohol a un mínimo de 50 peniques por cada unidad de alcohol, el precio de estas bebidas se podría duplicar en breve. Esto significaría que una lata de cerveza pasaría a costar un mínimo de 1.25 euros. En un supermercado, ni siquiera hablamos de un bar. Y eso por no mencionar el precio de rones y vodkas...

La posición oficial del gobierno se dirige a reducir las muertes por alcohol. Obviamente también se ingresaría una ingente cantidad de dinero en impuestos. Por no hablar de que las muertes por alcohol ya se están reduciendo debido a la crisis económica (algo bueno tenía que haber) y el consecuente descenso de las ventas ha puesto en riesgo más de 9,000 puestos de trabajo sólo en Irlanda.

Añadamos a eso que una entrada de cine cuesta 10 euros, la previa prohibición de la prostitucion y un hipotético impuesto sobre el chocolate, y definitivamente, la fiesta se habrá terminado.

Creo que no voy a salir de casa en mi cumpleaños.


Foto: The Simpsons.